martes, 21 de septiembre de 2010

El violoncello

Este instrumento, que representa el bajo de la familia del violín, apareció poco después de éste, alrededor de 1560. En efecto, los bajos de la viola da braccio, construidos por los Amati, Gasparo da Saló y Maggini en las últimas décadas del siglo XVI son verdaderos violonchelos, cuya forma, derivada del violín, los distingue de los bajos de las otras familias de instrumentos de arco.

Aunque su aparición es casi contemporánea a la del violín, el violonchelo tardó mucho más en imponerse ya que tuvo que soportar durante mucho tiempo la tenaz competencia del bajo de viola da gamba.
La primera música dedicada específicamente al violonchelo solista fue escrita en Italia alrededor de 1689 (Ricercari e canzoni, de Domenico Gabrielli, y Sonare, de Jacchini). Hay que llegar hasta Beethoven para que este instrumento sea apreciado en su justo mérito en la orquesta

El Cello o Violoncello es en esencia un violín bajo que se toca manteniéndolo de pie.




Su tono es rico y sonoro, y sus cuerdas altas, tiene una cualidad melódica inconfundible. El cello se adapta perfectamente tanto a la intimidad de un cuarteto de cuerdas como a una orquesta.


Extensión Sonora: Tres octavas y media.

Material: Su cuerpo mide 75 cm. de longuitud.

Origen: a mediados del siglo XVI, el cello apareció en Europa en forma de un violín de gran tamaño.

Clasificación: Cordófono: es un instrumento que produce el sonido por la vibración de las cuerdas.









Está entre la viola y el contrabajo. Se toca con un arco, y el instrumento apoyado en el suelo y sujeto entre las piernas del violoncellista. La palabra proviene del termino italiano violoncello que se pronuncia igual que significa "violón del cielo" Las partes del violonchelo son las mismas que las del resto de instrumentos de cuerda frotada. En la parte inferior lleva una pieza de hierro llamada pica, cuya misión es fijar el instrumento en el suelo y regular la altura del mismo. Es el instrumento de cuerda que tiene un mayor parecido a la voz humana. A pesar de su tamaño, es uno de los instrumentos más versátiles y expresivos. El chelo se desarrollo a partir del 1500, y convivió durante un tiempo, con su antecesora, la viola da gamba, que fue desapareciendo gradualmente. Desde principios de 1700, el chelo se ha convertido en uno de los instrumentos favoritos para interpretar solos.






El apogeo del violonchelo comienza durante el barroco. Muchos compositores lo usan de manera recurrente como bajo continuo de las obras, junto con el clavecín, y ya se empieza a usar para agrupaciones más pequeñas, dúos, tríos y cuartetos. Con la gran popularidad que tuvo como bajo continuo, acabó por desplazar totalmente en este período a la viola da gamba, y se consolidó como instrumento recurrente en las agrupaciones de cámara.


Entre los grandes cellistas podemos mencionar a:

  • - Pau Casals
  • - Luigi Boccherini
  • - YoYo Ma
  • - Mstislav Rostropovich
  • - Jaqueline Dupré
  • - Leonard Rose entre otros…






Entre las piezas más destacadas para este instrumento se encuentran:
- 27 conciertos para violonchelo de Vivaldi
- 12 conciertos de Luigi Boccherini
Obras para violoncello solista:
6 suites para violonchelo solo Johann Sebastián Bach
· Suite n.º 1 en sol mayor, BWV 1007
· Suite n.º 2 en re menor, BWV 1008
· Suite n.º 3 en do mayor, BWV 1009
· Suite n.º 4 en mi bemol mayor, BWV 1010
· Suite n.º 5 en do menor, BWV 1011
· Suite n.º 6 en re mayor, BWV 1012
Benjamin Britten
· Suite n.º 1, en sol mayor, op. 72
· Suite n.º 2, en re mayor, op. 80
· Suite n.º 3, en do menor, op. 87
Paul Hindemith 
· Sonata para violonchelo n.º 3, op. 25
Zoltán Kodály 
· Sonata para violonchelo en do mayor, op. 8
· Capriccio
Iannis Xenakis 
· Nomos Alpha para violonchelo solo
Julián Carrillo 
· Seis casi sonatas para violonchelo en cuartos de tono

Sonatas y otras obras para violonchelo

Johann Sebastian Bach Según su título original, estas sonatas de Bach no son para violonchelo sino para viola da gamba
· Sonata en sol mayor para violonchelo y clavecín, BWV 1027
· Sonata en re mayor para violonchelo y clavecín, BWV 1028
· Sonata en sol menor para violonchelo y clavecín, BWV 1029
Ludwig van Beethoven 
· Sonata en fa mayor, op. 5 n.º 1
· Sonata en sol menor, op. 5 n.º 2
· Sonata en la mayor, op. 69
· Sonata en do mayor, op. 102 n.º 1
· Sonata en re mayor, op. 102 n.º 2
· 12 variaciones de «Ein Mädchen oder Weibchen» op. 66
· 12 variaciones de «Judas Maccabée» WoO 45
· 7 variaciones de «Bei Männern, welche Liebe fühlen» WoO 46
Pierre Boulez 
§ Messagesquisse para violonchelo solista y seis violonchelos
Johannes Brahms 
Sonata en mi menor, op. 38
Sonata en fa menor, op. 99
Gaspar Cassadó 
Conciertos para violonchelo
Carl Philipp Emanuel Bach
  • Concierto para violonchelo en la mayor
  • Concierto para violonchelo en la menor
  • Concierto para violonchelo en si bemol mayor
Luigi Boccherini 
  • Concierto n.º 1 en mi bemol mayor, G. 474
  • Concierto n.º 2 en la mayor, G. 475
  • Concierto n.º 3 en re mayor, G. 476
  • Concierto n.º 4 en do mayor, G. 477
  • Concierto n.º 5 en re mayor, G. 478
  • Concierto n.º 6 en re mayor, G. 479
  • Concierto n.º 7 en sol mayor, G. 480
  • Concierto n.º 8 en do mayor, G. 481
  • Concierto n.º 9 en si bemol mayor, G. 482
  • Concierto n.º 10 en re mayor, G. 483
  • Concierto n.º 11 en do mayor, G. 573
Piotr Ilich Chaikovski 
  • Variaciones sobre un tema rococó para violonchelo y orquesta, op. 33
Antonín Dvořák 
  • Concierto para violonchelo y orquesta n.º 1, en la mayor.
  • Concierto para violonchelo y orquesta n.º 2, en si menor, op. 104.
Joseph Haydn 
  • Concierto n.º 1 para violonchelo y orquesta, en do mayor, HOB VIIB 1
  • Concierto n.º 2 para violonchelo y orquesta, en re mayor, HOB VIIIB 2
  • Concierto n.º 4 para violonchelo y orquesta, en re mayor.
  • Concierto n.º 5 para violonchelo y orquesta en do mayor HOB VIIIB 5 (aunque se le atribuye a David Popper)
Serguéi Prokófiev 
  • Sinfonía-concierto en mi menor para violonchelo y orquesta, op. 125
  • Concertino en sol menor para violonchelo y orquesta, op. 132
Robert Schumann
  • Concierto para violonchelo y orquesta, en la menor, op. 129.
Dimitri Shostakovich 
  • Concierto para violonchelo y orquesta, n.º 1 en mi bemol mayor, op. 107
  • Concierto para violonchelo y orquesta, n.º 2 en sol menor, op. 126
Antonio Vivaldi 
  • Conciertos para violonchelo, orquesta y bajo continuo:
  • RV 398 en do mayor.
  • RV 399 en do mayor.
  • RV 400 en do mayor.
  • RV 401 en do menor.
  • RV 402 en do menor.
  • RV 403 en re mayor.
  • RV 404 en re mayor.
  • RV 405 en re menor.
  • RV 406 en re menor.
  • RV 407 en re menor.
  • RV 408 en mi bemol mayor.
  • RV 409 en mi menor.
  • RV 410 en fa mayor.
  • RV 411 en fa mayor.
  • RV 412 en fa mayor.
  • RV 413 en sol mayor.
  • RV 414 en sol mayor.
  • RV 415 en sol mayor.
  • RV 416 en sol menor.
  • RV 417 en sol menor.
  • RV 418 en la menor.
  • RV 419 en la menor.
  • RV 420 en la menor.
  • RV 421 en la menor.
  • RV 422 en la menor.
  • RV 423 en si bemol mayor.
  • RV 424 en si menor.
  • Concierto para dos violonchelos y orquesta, RV 531 en sol menor.





Y por último, una visión rejuvenecida del chelo.


jueves, 2 de septiembre de 2010

La viola



La viola es un instrumento musical de cuerda, similar en cuanto a materiales y construcción al violín pero de mayor tamaño y proporciones más variables.


Su tesitura se sitúa entre los graves del violín y los agudos del violonchelo y el contrabajo. Es considerada como el Contralto o el Tenor Dramático de la familia de las cuerdas. Su antecesor fue la viola da braccio.


Al intérprete se le llama «viola» o «violista» (esta última palabra no está registrada en el Diccionario de la Real Academia pero sí aparece en diccionarios de uso).

Las cuerdas de la viola están afinadas en intervalos de quintas: do, sol, re, la (siendo do la más grave).
Este es el alto de la familia de las cuerdas. Tal como hemos indicado arriba, la palabra francesa para viola es "alto". Al igual que el violín tiene cuatro cuerdas afinadas en quintas.
La viola que actualmente conocemos nace entre los siglos XVI y XVII. Su tamaño es algo mayor que el violín. Sirve de puente sonoro entre éste y el violoncello, lo mismo en el cuarteto de cuerda que en toda formación orquestal. Su tesitura central es la mejor y la que conserva además su verdadero carácter. Se sostiene con el brazo izquierdo en posición horizontal, al igual que el violín y se apoya su caja armónica de la misma manera que éste, o sea debajo de la barbilla.
Su poder expresivo es notable. De acento más bien suave, recogido y algo melancólico, se presta más a pasajes de poco movimiento que excesivamente rápidos. Entre las obras orquestales en las que tiene asignada partes importantes, figuran la Sinfonía Concertante de Mozart y el poema sinfónico de Richard Strauss «Don Quijote», ambas con carácter solístico.



 

En el siglo XVII el papel de la viola se limitaba a reforzar la línea del bajo o completaba la armonía. En el siglo XVIII la viola tiene un papel más expuesto (tercer concierto de Brandemburgo). En este siglo Telemann compone el primer concierto para viola en 1731. En los cien años siguientes se alcanza la edad dorada de la historia de la viola. Se componen 150 conciertos por varios compositores como Stamitz, Hoffmeister, Zelter, Rolla...

Algunos compositores violistas cuyo repertorio ha permitido el desarrollo de la viola como instrumento solista y virtuoso son: Lionel Tertis (1876-1975); Paul Hindemith (1895-1963); Vandin Borisowscki (1900-72); William Primrose (1904-82)...
Las violas construidas en el siglo XVIII tenían unas dimensiones de 38 cm. para combinar su uso con el violín. En esta época aparece la scordatura que se basaba en afinar la viola más alto de lo normal. A finales de este siglo, se empezaron a construir violas grandes aunque eran muy escasas. Éstas tenían un tamaño de 45 a 47 cm. pero eran todavía de muy baja calidad.
La viola es conocida actualmente como un instrumento de cuerda frotada algo mayor que el violín; sin embargo, con este nombre se conocía en la Edad Media a todo cordófono de arco de varias piezas y fue ésta la primera denominación utilizada para definir a los instrumentos de cuerda frotada, tanto de brazo como de pierna.
Durante el renacimiento, la familia de la viola original se dividió en dos ramas: las violas "da braccio" y las violas "da gamba". Las violas de brazo quedaron relegadas a las tabernas, en donde tocaban músicas populares; mientras que las violas de gamba eran exclusivas de las cortes más refinadas. Este instrumento acabó cayendo en desuso y el violín fue sustituyéndolo por su brillantez. Los compositores preferían dicho instrumento por su amplitud sonora y la agilidad en vez de la delicadeza de las violas de gamba
Antecedentes de la viola
Nacida entre los siglos XIV y XV, su cultivo empieza ya a tomar valor artístico a partir de este último siglo. Su primer método o tratado fue publicado en 1543 por Silvestro Ganassi dal Fontego, bajo el nombre de Régola Rubertina.

Teniendo en cuenta que en aquella época la mayoría de instrumentos tenían tres o cuatro variantes correspondientes a la extensión de las voces humanas (soprano, contralto, tenor y bajo), es decir las cuatro voces tradicionales del coro mixto, la viola no escapó a dicha costumbre y por ello conocemos la viola quintón (la más aguda o sea soprano). El nombre de quintón proviene de sus cinco cuerdas en lugar de las seis que tenían las demás violas. La viola a spalla (‘viola de hombro’), la viola da braccio (‘viola de brazo’, que es la más parecida a la actual) y la viola da gamba (‘viola de pierna’, de tesitura y modo de ejecución similar al violonchelo).




De la viola da braccio surgió la viola d'amore («viola de amor»). La diferencia entre ellas consiste únicamente en que a la segunda se le añadieron unas cuerdas de latón que descansando en el puentecillo debajo de las de tripa, vibraban por simpatía, ampliando con este procedimiento la sonoridad del instrumento, aparte de darle también un timbre especial gracias a esta vibración común y a la sonoridad metálica de las cuerdas inferiores.




En estos bellos instrumentos se acusa ya mucho la transformación que desde siglos anteriores venía haciéndose lenta y paulatinamente. En lugar de la llamada «rosa» (abertura practicada en la mitad de la tabla armónica o caja de resonancia al igual que el laúd, la vihuela, la guitarra, etc. o sea los instrumentos cuyas cuerdas se pellizcan o puntean), aparecen unas pequeñas aberturas conocidas con el nombre de oídos o efes y en forma de C puestas una enfrente de otra y en sentido inverso. También aparecen unos cortes laterales curvados para facilitar el movimiento del arco. Estos cortes llegaron a ser en algunos casos tan exageradamente pronunciados que la caja armónica en su parte central quedaba reducida a la mínima expresión.





Como el clavecín, la viola penetró también en el templo para apoyar las voces y muy particularmente para las de tesitura grave.


Nota: La viola es conocida en Francia con el nombre de alto y en Alemania con el de Bratsche (pronunciado brache), cuyo origen proviene del italiano (Viola da bracchio).